Aprendiendo a ser maestro en una Escuela Unitaria. José Juan Barba

Las páginas que componen este libro narran la historia de un maestro poco convencional. No es un maestro que aproveche la primera oportunidad para llevar a cabo su vocación, enseñar, sino que se dedica a aprender, con los niños y niñas que comparte aula, lo que es la docencia práctica.

La administración decidió que enseñara en una Escuela Unitaria a niños de infantil, cuando era maestro de primara. La formación teórica no le aseguró todas las competencias que le hacían falta, cómo enseñar a leer o a a sumar… la docencia trascendía al proceso de enseñanza-aprendizaje en algunos momentos, como cuando aparecían las pulgas en el aula, o cuando comenzaba a sangrar una nariz. La inexperiencias y la soledad hacían duro sobrevivir el día a día.

En la vida los problemas se pueden afrontar de dos formas: lamentándose o afrontándolos. Plantar cara a la situación de forma optimista, reflexiva y autocrítica le permitió vivir experiencias inigualables y enriquecedoras: Ver como los niños descubrían que eran capaces de leer un cuento y eso les emocionaba al igual que a sus familiares; el aprendizaje de la suma y la resta, los colores, conoces nuevos animales, disfrutar un día en el Zoo… en lo personal también vivió, y aún sigue viviendo, grande experiencias como: Ser capaz de integrarse como uno más en el pueblo, la valoración y reconocimiento de su trabajo; y sobre todo, como mejoraba como maestro y así desarrollaba su vocación.

Las páginas de este libro están escritas con el alma, en las que la educación trasciende de la mente y el cuerpo para instalarse en las emociones y en los sentimientos